Así lo ha indicado a EFE la madre abadesa del convento, la hermana Inmaculada, tras la visita que esta semana han realizado los técnicos del Consorcio Ciudad de Cuenca, organismo que se encargará de sufragar la reparación de los daños tras el fuego intencionado del pasado 3 de mayo.
La religiosa ha explicado que la restauración de la fachada de este inmueble del siglo XVI, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), se dilatará algo dados los desperfectos sufridos por el fuego y el humo, pero la intención es que se pueda acceder a la iglesia por un paso alternativo.
Aunque desconocen los plazos de restauración, la hermana Inmaculada ha confiado en que sea pronto porque, según ha reconocido, echan de menos compartir la liturgia y la eucaristía con los fieles.
También ha explicado que quizá los daños sean mayores de los que se pensaron inicialmente, dado que el fuego y el humo han afectado a la fachada principal, la entrada y algo de la bóveda, aunque esto lo tendrán que determinar y precisar los técnicos.
Después de declararse el incendio, una empresa de limpieza industrial ha realizado tareas en el interior mientras se intenta purificar el aire con un cañón de ozono.
La abadesa ha confiado en que esto permita retomar la liturgia con los fieles en cuanto se habilite un paso alternativo.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Cuenca decretó prisión provisional comunicada y sin fianza para el presunto autor de los hechos, un hombre que ya había provocado algunos altercados públicos en Cuenca.