Un estudio realizado por la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa revela que las ayudas al funcionamiento en Soria, Cuenca y Teruel apenas han tenido impacto en la creación de empleo. Los empresarios de estas provincias reclaman al Gobierno español una mayor intensidad en las ayudas, que podrían generar hasta 13.000 empleos. El estudio muestra que las ayudas actuales son consideradas insignificantes por la mayoría de los empresarios encuestados.
Un estudio elaborado por la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa demuestra, con respuestas de los propios empresarios, que el escenario actual de la aplicación de las ayudas al funcionamiento en Soria, Cuenta y Teruel apenas han tenido repercusión en la creación de empleo en las provincias más despobladas de España en 2023.
Por este motivo, los empresarios de estas tres provincias han reclamado este lunes al Gobierno de España la "máxima intensidad permitida por la Unión Europea (20 por ciento)", que podría generar hasta 13.000 empleos.
La directora general de FOES, María Ángeles Fernández, y el doctor en Economía, José Antonio Herce, han comparecido en la sede de la patronal soriana para presentar la segunda parte de un estudio que demuestra la efectividad que tendrían las ayudas al funcionamiento en Soria, Cuenca y Teruel, si se aplicasen al máximo permitido por la Unión Europea.
Herce ha explicado que la encuesta realizada llega a la conclusión que el impacto de las ayudas de funcionamiento es “insignificante” y, es más, muchos empresarios reconocen que desconocían el impacto de la aplicación de estas ayudas.
La mayoría de los empresarios encuestados (93,1 por ciento) ha señalado que las ayudas son insignificantes o insuficientes para generar empleo en sus empresas.
Herce ha señalado que las ayudas son "tan insignificantes" que, el coste de ayudas, podría ascender a 25 millones, con un impacto sobre el PIB también ”insignificante”, y apenas creados 128 empleos, y un retorno fiscal de casi seis millones.
El 71,5 por ciento de los encuestados conocían la existencia de las ayudas al funcionamiento, pero sólo el 55,9 por ciento de los encuestados sabían que estaban siendo beneficiarias de ellas, por ser tan insignificantes.
El 56,9 por ciento de los encuestados han aumentado su plantilla en 2023, pero sólo una “ínfima” proporción del total, un 2,9 por ciento, lo han hecho por influencia de las ayudas.
El 63 por ciento de las bajas valoraciones de las ayudas se encuentran entre los encuestados que no han aumentado las plantillas.
Solo 128 empleos creados
El estudio estima en 128 los empleos creados con el escenario actual de las ayudas al funcionamiento, que ascenderían a 6.000 empleos sí las ayudas se elevan hasta la exoneración de la cuota empresarial por contingencias comunes, y entre 11.000 y 13.000 empleos en la bonificación del 20 por ciento de los costes laborales brutos.
Fernández ha reclamado dar un paso más en las ayudas al funcionamiento, cruciales para las empresas de estas tres provincias.
La Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa se dirigió en enero por escrito al nuevo Gobierno para reclamarle una mayor intensidad en las ayudas al funcionamiento, así como la equiparación entre las empresas existentes y las de nueva creación a la hora de recibir la bonificación, la inclusión en ella de los autónomos y la eliminación de las diferencias en el porcentaje de aplicación en función de los habitantes de los municipios establecidas en las actuales ayudas.
Las organizaciones empresariales de las tres provincias han solicitado el incremento de la intensidad de las ayudas, “comparable, al menos, a la que se aplica en Noruega, es decir, una reducción de 10 puntos porcentuales en el tipo de cotización social”.
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