El presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, y la vicepresidenta y diputada de Cuentas, Economía y Hacienda, Nuria Illana, han visitado el edificio que albergará la nueva sede del Organismo Autónomo de Gestión Tributaria y Recaudación (OAGTR) para formalizar la firma del acta de replanteo con el que se dará inicio a las obras.
Un proyecto que cuenta con un presupuesto de algo más de un millón de euros que fue adjudicado a la empresa Viales y Obras Públicas y que tiene un plazo de ejecución de nueve meses que comienzan a contar desde este momento, según explicaba el presidente.
Martínez Chana recordó el largo proceso que se inició la pasada legislatura con la intención de poder comprar el edificio donde se ubica ahora mismo el servicio pero ante la judicialización del proceso se vieron obligados a sacar una licitación pública para buscar un lugar adecuado para poder acoger al OAGTR con un mínimo de 600 metros cuadrado, acceso a la calle y situado en el centro de Cuenca. Una compra que se adjudicó por 420.000 euros y que permite, junto con estas obras, tener “el espacio que se merecen tanto trabajadores como el público en general”.
Asimismo, recordaba que se trabajará en paralelo en la dotación y equipamiento del edificio con el objetivo de agilizar el traslado lo antes posible confiando que a principios del próximo año pueda entrar en funcionamiento la nueva sede.
La vicepresidenta destacaba la importancia de que los 41 trabajadores que tiene el Organismo Autónomo de Recaudación dispongan de un lugar de trabajo con condiciones adecuadas recordando que gestiona más de 100 millones de euros de recibos de los ayuntamientos de la provincia lo que supone que en 2023 ha gestionado 80 millones de ingresos para los consistorios que es una de sus principales vías de financiación.
Un proyecto de modernización de las instalaciones que se ha realizado de la mano de los servicios técnicos y los propios trabajadores que son quienes mejor conocen las necesidades del mismo y que llevaban tiempo demandando. Una modernización que discurre en paralelo a la mejora del servicio implementando una administración electrónica que permite a los ciudadanos acceder a sus recibos, plan de fraccionamiento o domiciliación de los pagos. En definitiva, añadía Illana, se trata de facilitar los trámites tanto para los consistorios como a los vecinos con un acceso rápido y sencillo a la información que se necesite.
El proyecto de las obras supone una actuación en una superficie de más de 2.000 metros cuadrados divididos en tres plantas de las que sólo la primera planta se utilizará como oficinas y atención al público con un espacio de 700 metros cuadrados dando cabida a los 41 trabajadores que actualmente componen la plantilla del Organismo Autónomo de Recaudación.
Las otras dos plantas, situadas en niveles inferiores, se destinarán para almacenes, archivos, cuartos técnicos y zonas de uso constante del de personal contando con los sistemas más modernos de calefacción por aerotermia y domótica que permitirá un considerable ahorro energético y medioambientalmente más sostenible.
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