El sistema sanitario de Castilla-La Mancha está registrando un aumento de la presión asistencial debido al incremento de los casos de bronquiolitis y otras infecciones respiratorias, ha informado la consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, quien ha añadido que sin embargo no hay saturación ni caos.
A preguntas de los periodistas en una rueda de prensa, ha indicado que en otras comunidades autónomas el repunte de la bronquiolitis y de otras infecciones del sistema respiratorio están suponiendo un problema para el sistema público de salud, pero en Castilla-La Mancha "no tenemos un problema de saturación" aunque sí una "alta frecuenciación y un incremento hospitalario".
La portavoz ha destacado que en la región está controlada en este momento la situación porque hay camas y profesionales suficientes, y ha añadido que las comunidades autónomas donde se están presentando más problemas es en aquellas que despidieron a la mayoría de los refuerzos contratados para el covid, "situación que no es la misma en Castilla-La Mancha, por tanto, tenemos margen para atender a más gente".
Tampoco se ha suspendido la actividad programada en la región, ha explicado Fernández, quien ha apuntado que la situación es muy heterogénea con hospitales en los que solo hay un caso y otros donde ya se está notando una alta frecuenciación.
La provincia castellano-manchega más afectada es Albacete donde hay un aumento de la presión en las urgencias pediátricas y se ha pasado de una media de 80 casos diarios a 140; y también se ha registrado un 27 % más de ingresos hospitalarios, comparando los datos del periodo entre el 1 de octubre y el 22 de noviembre de este año con los del anterior.
"Estamos asumiendo esa presión asistencial sin suspender actividad programada, y así entendemos que lo vamos a poder seguir haciendo en las próximas semanas", ha asegurado la portavoz del Gobierno regional, quien ha añadido que "por tanto, no podemos hablar de saturación ni caos, pero sí de un aumento de la presión asistencial a la que estamos respondiendo".
"Hay que dar las gracias a los magníficos profesionales sanitarios que tenemos en el sistema público de salud, y afortunadamente a un buen número de ellos que no fueron despedidos" tras la fase alta de la pandemia de corornavirus.