Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La mancha se valora la decisión de Unión Europea y Estados Unidos de poner fin a la disputa comercial que estaba perjudicando de manera directa al sector agroalimentario castellano-manchego.
Según se ha informado en diversos medios y la propia UE, Estados Unidos y la Unión Europea han llegado a un acuerdo de colaboración para dar continuidad a la suspensión de aranceles durante cinco años, una situación que afectaba a 113 categorías de productos agroalimentarios, el 53,1 % de lo exportado a EEUU. Esta situación motivó que, debido a un terremoto comercial derivado de otro tipo de industrias (Airbus y Boeing), las exportaciones de productos agroalimentarios descendieran de manera considerable en el periodo en el que se aplicaron los aranceles.
Para la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha supone una buena noticia debido a que los movimientos a nivel mundial y global afectan cada vez más a “las producciones y explotaciones locales de regiones agrícolas y ganaderas como la nuestra. Sobre todo en productos como aceite o vino”, matizan desde UPA.
Así, esta decisión es un paso decisivo para acabar con el conflicto de los aviones, el motivador del terremoto comercial que supone, asimismo, el acuerdo de suspender la aplicación de aranceles perjudiciales por valor de 11.500 millones de dólares durante un periodo de cinco años que afectaban a productos agroalimentarios como el aceite o el vino español.