Todos los países tienen marcada en su agenda para 2030 lo que se han llamado los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS). El primero de ellos es la erradicación de la pobreza. En España los datos revelan que todavía hay mucho trecho por recorrer para alcanzar ese objetivo. Así se desprende de los datos que la consultora española AIS Group, especialista en la generación de indicadores, ha publicado sobre el riesgo de pobreza infantil, provenientes de sus indicadores Habits Big Data. De acuerdo a esta información, la región con la situación más preocupante es Extremadura donde el 51% de los niños y niñas están en situación de riesgo de pobreza. De hecho, la tasa de Cáceres es la más alta de toda España rozando el 54%.
Una situación muy distinta es la que se observa en el norte peninsular. En las provincias septentrionales es donde la tasa de población infantil en riesgo de pobreza es más reducida, encabezadas por Navarra, donde supera ligeramente el 11%. Inmediatamente detrás están Bizkaia (12,3%), Gipuzkoa (12,9%) y La Rioja (13,2%). Las siguientes ya presentan una tasa más elevada que el 17%. Es el caso de Zaragoza (17,5%), Lleida (17,9%) y Asturias (18,1%). Más próximas al 20% están ya Barcelona (19,3%), Araba (19,3%) y Teruel (19,6%).
Castilla - La Mancha con una tasa de pobreza infantil del 37,2% se sitúa como la sexta comunidad con el índice más alto de pobreza, siendo Cuenca la provincia con la ratio más alta con un 39,9%, seguida de Toledo con un 38,9%, Ciudad Real con un 37,7%, Albacete con un 35,6% y Guadalajara con un 32,1%.
Volviendo a las regiones con mayor tasa de población infantil en riesgo de pobreza, tras Extremadura es Andalucía la comunidad que presenta un peor resultado. El 40,6% de la población infantil está en riesgo de pobreza. De sus provincias la que ofrece una tasa más elevada es Almería, que con un 43,8% es la tercera más alta de toda España, sólo superada por Cáceres (54%) y Badajoz (50,7%).
El resto de provincias andaluzas están todas por encima del 40% y encabezan el ranking de las regiones con peor situación para la infancia en términos de riesgo de pobreza. Sólo Sevilla, con un 38,6%, escapa de esas primeras posiciones y se sitúa en la 15ª.
Además de las provincias extremeñas y andaluzas, entre las que presentan una tasa superior al 40% se cuenta también Las Palmas (Canarias), concretamente con un 40,9% de niños residiendo en hogares en riesgo de pobreza.
Estos porcentajes son bastante más altos de lo que es la media española que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, se sitúa en el 28,1% para los menores de 16 años.
Agustí Amorós, director de desarrollo de negocio de AIS Group, hace notar que una vez más la frontera norte-sur es más que evidente en la población española y los datos de riesgo de pobreza infantil son una consecuencia de la suma de muchos otros factores como la desigualdad en el nivel de renta o el nivel de desempleo. Lo cierto es que la pobreza y el riesgo de caer en ella es algo frente a lo que hay que tomar muchas medidas. “Desde AIS Group queremos sumarnos a la consecución de su erradicación como exigen los ODS marcados por la ONU en la Agenda 2030”, comenta Amorós. “Disponemos de 1.790 indicadores desagregados hasta nivel de sección censal, código postal y municipio para contribuir a medir la evolución en la consecución de los ODS y ayudar a implementar políticas socioeconómicas para alcanzar estos objetivos”, concluye.
¿Qué son los indicadores Habits?
Habits Big Data presenta una segmentación de las familias españolas en tipologías a partir de sus rasgos sociodemográficos y económicos. Permite conocer la presencia y perfil de gasto de cada tipología de hogar en cada microzona. Es decir, no sólo define los tipos de familia, sino que las sitúa geográficamente, de modo que puede saberse la densidad de cada tipología que hay en cada zona.
Además de toda la información relativa a los perfiles de consumo, los ingresos y las tipologías de las familias, Habits dispone de otra información demográfica como la tasa de paro total y por tramo de edad en cada área. También indicadores económicos, información catastral y datos relacionados con la vivienda (como el precio medio del m2 en la zona y el precio de venta y/o alquiler de todos los inmuebles), información relativa al parque móvil e incluso detalles sobre la climatología de cada zona. Otros indicadores facilitados son los de Riesgo de Pobreza e Índice de Capacidad Económica.
El objetivo principal de Habits es dotar a las compañías de un profundo conocimiento del cliente (real y potencial), para que puedan tomar las decisiones más acertadas para el negocio y emprender así acciones de marketing, de distribución y de expansión más efectivas y rentables.
También el sector público es beneficiario de los indicadores Habits, pues el conocimiento que aportan sobre las familias es una fuente muy interesante para mejorar el servicio de las administraciones a los ciudadanos a través de actuaciones municipales más eficaces.