Los concejales del Grupo Municipal Ciudadanos en el Ayuntamiento de Cuenca han agradecido al resto de grupos políticos su “implicación con la ciudad” al aprobar una moción presentada por el grupo naranja, en la que se pide la creación de una bolsa de alquiler social para todos los ciudadanos que, por diferentes motivos, no pueden acceder al mercado inmobiliario.
Gracias al apoyo de todos los grupos, se va a poner fin a una gestión opaca del patrimonio municipal; lo que se traducirá en mayor eficiencia económica, que repercutirá en beneficios de la ciudad y sus habitantes, como garantía de interés general.
El objetivo del grupo Ciudadanos es acabar con las adjudicaciones a criterio del Alcalde de turno, que han conllevado a arrendamientos, cesiones y subrogaciones por decreto o sin contrato, al margen de las cedidas por razones de emergencia social y las ocupadas ilegalmente.
“Existen contratos que datan de hace 30 y casi 50 años que no han sido revisados, habiendo podido variar las circunstancias por las que fueron adjudicados o cedidos, y ya no debieran ser beneficiarios de una vivienda social por definición” ha remarcado Amores durante el pleno.
La moción plantea que se creará una bolsa de alquiler social, tanto para viviendas como locales para emprendedores, a la que puedan acceder aquellas familias y jóvenes cuyos recursos no les permitan hacer frente a un alquiler regulado por el mercado inmobiliario.
Ruegos y preguntas
En el orden de preguntas, formuladas por el concejal Antonio Calvo, la agrupación se interesó por el proyecto de remontes que la ciudad necesita para el acceso al casco antiguo, a lo que el Equipo de Gobierno respondió con un tajante “ni hay remontes, ni hay proyecto” en palabras de Julián Huete, concejal de Urbanismo.
A la pregunta sobre la Fundación Saura y el impedimento legal que ha llevado a la ciudad de Cuenca a perder la exposición Roberto Polo, la respuesta fue que la Fundación ha interpuesto un interdicto, y que el consistorio no puede hacer uso de este espacio para la exposición en tanto no se resuelva este tema.
En cuanto a los ruegos, el concejal Antonio Carrasco pidió al Equipo de Gobierno, entre otras cosas, más contenedores de reciclaje y orgánicos, mayor presencia policial, el acondicionamiento de la zona infantil de Fuente del Oro y la retirada de los carteles inservibles que salpican la ciudad; a lo que respondieron, como en tantas ocasiones, que “toman nota de ello”.
En lo referente a la Torre de la Mendoza y su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), el Ayuntamiento le “lanza la pelota” a la Junta de Comunidades una vez más.
Ciudadanos además, pidió que se tome en consideración ubicar contenedores de reciclaje de tapones de plástico, que pudieran ayudar a su recogida y gestión por parte de las Asociaciones sin ánimo de lucro que utilizan el reciclado de estos tapones para subvencionar proyectos solidarios. En esta ocasión se volvió a contestar que “toman nota de ello”.