La Guardia Civil investiga a un conductor como supuesto autor de un delito contra la seguridad del tráfico, al conducir un camión bajo la influencia de bebidas alcohólicas y acompañado de su hijo, un menor de edad.
El hecho tuvo lugar durante la noche del pasado jueves, día 3, cuando la Sala 112 alertó al C.O.C. de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca, que un joven, de 15 años, que viajaba junto a su padre, manifestó, que éste conducía bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
Inmediatamente, por parte de la Guardia Civil de Cuenca se estableció un operativo policial, coordinado por el C.O.C. para su localización.
Sobre las 23,30 horas del mismo día, agentes del Puesto de la Guardia Civil de Tragacete (Cuenca), procedieron a la identificación del conductor de un camión que superaba las ocho toneladas. El hecho tuvo lugar en la carretera CM-2105, dentro del término municipal de Cuenca.
Tras practicarse las pertinentes pruebas de alcoholemia, en las que arrojó un resultado positivo de 0,90 mg/l y 0,88 mg/l de alcohol en aire espirado, en sendas pruebas reglamentarias que se le practicaron, multiplicando casi por seis la tasa máxima permitida para los conductores profesionales que es de 0,15 mg/l
Ante esta circunstancia, el conductor del camión, un varón de 43 años y residente en la provincia de Murcia fue investigado por agentes del Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Cuenca como presunto autor de un delito de conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas, siendo puesto a disposición de los Juzgados de esta Capital.
El delito de conducir bajo los efectos de bebidas, con tasas superiores a 0.60 mg/l, se encuentra recogido en el artículo 379 del Código Penal y puede ser castigado de forma alternativa con penas de prisión entre 3 y 6 meses, multa entre 6 y 12 meses, trabajos en beneficio de la comunidad entre 31 y 90 días; sin olvidar, en cualquier caso, la prohibición del derecho a conducir ciclomotores y vehículos a motor por tiempo superior a 1 e inferior a 4años
La Guardia Civil quiere reiterar su mensaje a los conductores que de forma imprudente conducen después de haber bebido o tomado algún tipo de sustancias estupefacientes, haciendo caso omiso a las indicaciones de la Dirección General de Tráfico.
Asimismo, por parte de la Benemérita, se apela a la conciencia cívica ciudadana para que, sin dudarlo, como en este caso, avisen al teléfono 062 (Guardia Civil) o a la Sala 112 (Emergencias), cuando observen maniobras irregulares o situaciones anómalas que hagan pensar que los conductores las están efectuando bajo los efectos del alcohol o las drogas, con la única finalidad de poder establecer las medidas policiales adecuadas para comprobar si los mismos están en condiciones de circular con las adecuadas garantías y evitar así riesgos innecesarios .
Por último, se recuerda que la tasa máxima con la que se puede conducir un vehículo, con carácter general, está establecida en 0’25 mg/l. de alcohol en aire espirado, quedando establecida en 0.15 mg/l para los conductores profesionales.
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