El novedoso programa de Termalismo para Personas con Discapacidad del Gobierno de Castilla-La Mancha ha llegado a 145 beneficiarios en la primera convocatoria, que se ha desarrollado durante los meses de junio y julio, y en la que han participado también familiares y profesionales.
Se trata de la primera vez que el Gobierno regional pone en marcha este programa, desarrollado por Plena Inclusión y dirigido a que las personas con discapacidad disfruten de un tratamiento especializado para mejorar su calidad de vida durante la estancia y también en periodos posteriores.
Además de ser un tratamiento terapéutico, supone un respiro hidrotermal para los familiares y permite a los profesionales unificar criterios y metodología.
Durante la primera convocatoria, han participado once grupos en cuatro balnearios de la Red regional, uno ubicado en la provincia de Toledo y otros tres en la de Albacete; mientras que la segunda convocatoria se celebrará en los meses de octubre y noviembre, con la previsión de congregar a alrededor de un centenar de participantes.
El Termalismo para Personas con Discapacidad se suma al dirigido a personas alzhéimer y con párkinson, además del programa de Termalismo Social para personas mayores de 65 años, para el que se han ofertado 5.000 plazas en 2018.
Las estancias son de cinco días y cinco noches, con pensión completa, y se ofrece alojamiento y manutención, tratamiento termal y actividades socioculturales y de ocio.
El programa de Termalismo del Gobierno de Castilla-La Mancha supone un generador de economía y empleo en la región, especialmente en las zonas rurales, ya que mantiene 600 puestos de trabajo directos y 1.700 indirectos.