Hacer de la sostenibilidad la bandera en la elaboración de vino y transmitir este mensaje a los potenciales consumidores es el principal reto para el sector. En esa idea han coincidido los siete ponentes que han participado en la III Jornada Técnica Divulgativa que organizaba la Denominación de Origen Uclés (primera D.O. en medir la Huella de Carbono en nuestro país) y que tenía lugar la pasada semana en el Monasterio de Santiago de la localidad conquense que da nombre a la denominación.
Más de 80 personas llenaron el salón de actos del edificio a las seis ponencias que se han impartido con el objetivo de profundizar en la sostenibilidad como oportunidad, sus ventajas e impacto económico y social, así como la incorporación de la sostenibilidad en la viticultura a través de ayudas públicas. Profesionales de ingenierías, de caldererías, enólogos, viticultores, profesores de universidad y universitarios de diversos ámbitos, consultores, miembros de la Unión Española de Catadores y de la Asociación Madrileña de Sumilleres y comunicadores, se dieron cita en esta jornada.
El viceconsejero de Medio Ambiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Agapito Portillo; inauguró las ponencias que también contaron con el acompañamiento de Joaquín Cuadrado, director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Cuenca; Paloma García Casado, presidenta del Patronato de Desarrollo de la Diputación de Cuenca; Marisol Cantarero, en representación de la Denominación de Origen Uclés; y Lola Núñez, gerente de esta denominación.
Andreas Kubach y la defensa de las diferencias
Andreas Kubach MW, Master of Wine y director general de Península Vinicultores y de Bodegas & Viñedos Fontana (perteneciente a la D.O. Uclés) hizo referencia a la necesidad de producir vinos que “merecen ser bebidos”, vinos auténticos, basados en la tradición y que conectan con los consumidores. “La gente busca autenticidad”, señalaba al respecto el MW, encargado de abrir el turno de ponencias.
“Con la viticultura ecológica no se vende un simple vino, se vende una filosofía de vida que va desde el viñedo hasta la botella”. El MW ha destacado que hay que diferenciar entre ecológico y sostenible, recordando que sostenibilidad se basa en lo social, lo económico y lo medio ambiental, idea que ha de alcanzar a todo el personal de bodegas, desde la parte financiera al resto de equipos.
También ha resaltado la necesidad de reforzar las múltiples variedades que distinguen los vinos de cada comarca. Y es que, como añadía este experto mundial en vino, “en Castilla-La Mancha, hasta el momento, se ha fracasado a la hora de comunicar las diferencias de cada uno de sus vinos”.
Santiago Mínguez: consejos prácticos para ser más sostenibles en bodega
El Doctor Ingeniero Agrónomo de la Universidad Autónoma de Barcelona, abordó la sostenibilidad desde un punto de vista práctico: tener en cuenta el diseño de la bodega, la biodiversidad, la integración de la bodega en el paisaje, el uso de energías renovables como el aislamiento térmico.
Para Mínguez, los Indicadores de trazabilidad de la sostenibilidad pasan por “tener presente la cantidad de agua que gastamos, saber lo que echamos al alcantarillado, la cantidad de energía que consumimos o los residuos que generamos”. La idea de la sostenibilidad, apuntaba Mínguez, tiene que llegar a dirección y personal de bodegas a través de formación en materia de sostenibilidad.
El reto de ser eficientes energéticamente, por Justo Banegas
Justo Banegas, de Alfatec Ingeniería-Consultoría, indicó algunas claves para ser más eficientes desde el punto de vista de la energía.
A día de hoy, las empresas vitivinícolas tienen varios retos por delante. Empezando por el trabajo en el campo, según Banegas “hay variedades no adaptadas al clima”, lo que provoca que toda la cosecha de uva entre en bodega en un periodo corto de tiempo. Esta situación “obliga a dimensionar la bodega, mientras que el resto del tiempo no hacemos uso de estas grandes instalaciones”.
Las recomendaciones de este ingeniero pasan por la optimización de los diseños productivos a la hora de hacer un proyecto de bodega. También aconseja revisar las tareas en las que se usa más energía, como en el desfangado del vino, el control de las temperaturas de fermentación, a veces demasiado bajas, y algo que remarcó mucho, el aislamiento de los tanques.
Al igual que Santiago Mínguez, Justo Banegas apelaba al uso de agua en bodega y que no sea mayor de dos o tres litros por cada litro de vino que se produce.
Banegas ha recordado, que en bodega “A veces es necesaria mucha energía y otras no”. De ahí que llamara a la unión del sector para hacer fuerza y que las compañías eléctricas presenten tarifas especiales para los momentos en los que las bodegas consumen más energía. “Es necesario asociarse”, comentaba.
Alfonso Rodríguez: el cambio climático en el viñedo
Alfonso Rodríguez, licenciado en Biología y doctor por la Universidad de Castilla-La Mancha, forma parte de la Oficina del Cambio Climático de Castilla-La Mancha. En su ponencia, se refería al contexto climatológico que hace necesario tomar medidas en cuanto a sostenibilidad.
Remarcó que, 2017 ha sido el año más cálido y seco desde 1965. Y que desde 1961 a 2006, la temperatura ha subido una media de tres grados. Cada vez tenemos menos precipitaciones y días de más de 30 grados. “Cuando llueve, lo hace de golpe”, apuntaba el experto en cambio climático.
Desde la oficina castellano-manchega informaban, además, que países que tradicionalmente tienen mayor dificultad para elaborar vino, como Alemania o Reino Unido, la subida de las temperaturas es favorable para la plantación de viñedos en sus territorios.
El suelo y el vino, por Francisco Jesús García Navarro y José Ángel Amorós
De los suelos de la Denominación de Origen Uclés y sus diferencias con otros suelos de Castilla-La Mancha habló García Navarro, catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de Ciudad Real, de la Universidad de Castilla-La Mancha. Manifestó que en los estudios que ellos realizan, se pueden medir hasta 27 elementos químicos, que se pueden transmitir al vino.
Nos indicaba que algunos trabajos pueden ser inadecuados, haciendo que se pierda la cubierta del suelo o la fertilización. Y una de esas prácticas puede ser el uso de lodos de depuradoras que hacen que se compacte el suelo.
José Ángel Amorós, también profesor de la Universidad de Castilla-La Mancha y gran conocedor de los suelos de la D.O. Uclés, nos indicaba que el “agrosistema vitícola es muy complejo en Castilla-La Mancha”, debido a las diferencias de cada territorio. En nuestra región tenemos desde suelos arcillosos, calizos de diferentes tipos, e incluso volcánicos, mencionaba el ponente.
En la actualidad, desde la Universidad de Castilla-La Mancha están estudiando la huella geoquímica de los suelos para comprobar hasta qué punto influyen en el resultado del vino.
Helena Fernández Castro: Se puede ser sostenible y rentable
Helena Fernández, directora de Medio Ambiente y Energía de eCo2 Innova Environment & Energy y licenciada en Ciencias Ambientales, cerró el capítulo de ponencias con propuestas enfocadas a la obtención de propósitos sostenibles en bodegas.
Para Fernández, “todo problema se puede convertir en una oportunidad gracias a la tecnología y determinación del empresario”. De ahí que encuentre “beneficios económicos en la sostenibilidad”. Dentro de poco, “los residuos tendrán que convertirse en un recurso”, apostillaba.
Ya hay bodegas que tienen instalada caldera de biomasa que genera calor y frío, utilizando restos de poda y restos de bodega. Asimismo ya existe el tractor que funciona con metano y bodega con electrolineras.
Con la normativa actual, según la ponente, “podemos tener una bodega totalmente aislada de la red o puede estar conectada a la red y tener en cuenta la energía que podamos generar para picos de mayor necesidad”. Y es que, la Estrategia 20/20/20 de Europa hará que para 2020 las reducciones tienen que llegar a un 20%. Mientras tanto, Europa sigue trabajando en normativas relacionas con la medición de la huella ambiental, y un indicador es la Huella de Carbono (medición que ya han realizado las bodegas de la comarca a través de la Denominación de Origen Uclés).
Como destacó Helena Fernández, en las ayudas tradicionales a la inversión, como FOCAL o VINATI, se valora de forma positiva y se traduce en la adjudican de mayor número de puntos en las empresas que están trabajando en la sostenibilidad. Y una nueva tipología de ayuda son los Proyectos CLIMA, con la creación de un nuevo valor y la posibilidad de que el ministerio te compre la reducción de emisiones. Es un programa de compra de emisiones de CO2 por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. La ponente hizo referencia además a la financiación mediante el ahorro.
Para Helena Hernández, “lo más importante es tener un sello sostenible y poder comunicarlo”, concluyó la experta.
Asimismo ha puesto el foco en la parte social de la sostenibilidad: “El viñedo está sujetado por los agricultores, que fijan población y están en el medio rural para crear riqueza”. Por lo que es necesario incorporar esta filosofía en los viticultores, de los que la bodega tiene que estar cerca. Lo que se traduce, en palabras de Fernández, en “unir la agricultura al cambio climático”. De esta manera, manifestaba que “si añadimos una creciente conciencia social avanzando hacia clientes que valoran la gestión sostenible de las empresas y disponer de productos y servicios más respetuosos con el medio ambiente, encontramos en la sostenibilidad uno de los mejores aliados para la mejora de la rentabilidad de las bodegas”.