La gran expectación generada y las previas expectativas que se levantaron entre los aficionados a la Tauromaquia en la taurina localidad de Villar de Olalla y sus alrededores, en fechas precedentes al mano a mano que dirimieron el pasado domingo en el marco de un festival taurino, los dos novilleros más emergentes del panorama actual conquense como son Aitor Darío "El Gallo" y Sergio López, echó al traste las ilusiones y esperanzas de unos y otros, en buena parte por el irregular juego desarrollado por los tres ejemplares de la archiconocida ganadería extremeña de Navalrrosal y uno de la madrileña ganadería de Hermanos Quintas, que en líneas generales adolecieron de clase en sus embestidas, tuvieron muy poca fijeza en los engaños y apretaron a los noveles lidiadores exigiéndoles valor y técnica, atributo este último, difícil de demandar a los novilleros de esta época debido a que lamentablemente se dan escasas novilladas, por lo cual están poco placeados.
Aitor Darío "El Gallo" abrió plaza con «Blanco», un novillo que no le regaló nada, correoso que le exigió mucho y en el que el torero conquense tanto con el capote como con la muleta se mostró especialmente voluntarioso pero en ningún momento consiguió acoplarse con su complicado oponente que pegaba copiosos gallafones.
Durante su labor muletera se palpó el peligro constante de su novillo, avisándole un par de veces y, en una de las tandas lo envió al hule. Tras pasaportar a su primero, pasó por la enfermería, donde fue atendido por el equipo médico de la Plaza de Toros de Villar de Olalla, capitaneado por el cirujano jefe, Dr. Rosales.
Tras ser intervenido de una cornada superficial y tras correrse turno por esta circunstancia, en su segundo que cerró plaza, «Lavandero», de vistosa capa berrenda, al igual que en su primero, "El Gallo" se mostró con una buena predisposición pero tampoco ese principal ingrediente fue suficiente para engatusar a su enemigo y por ende vivir un idílico romance con el novillo más potable de la tarde. Destacar la casta torera del novillero local que con todo el coraje del mundo salió de la enfermería a lidiar su segundo astado a revientacalderas.
Sergio López, ante su primero de nombre «Madroñoto», al igual que su compañero de cartel mostró valor y gallardía pero en ningún momento pudo atemperar la embestida de su novillo, un marrajo que le privó de cuajar una faena de enjundia.
En su segundo, de la ganadería de Hermanos Quintas, ante un llamativo y desrazado mastodonte berrendo, precioso de lámina pero con poco contenido, al ver que el animal le planteaba bastantes dificultades de acoplamiento y la faena no cogía altos vuelos, abrevió la faena y lo pasaportó con ligereza.
En resumen, los lidiadores dieron lección de entrega, ganas y pundonor, pero la impotencia y el mar de dudas de estos novilleros ante un encierro complicado, lleno de numerosas exigencias, propias del encaste Núñez y Santa Coloma, fue un denominador común durante todo el festejo.
Finalmente, hacer una especial mención al joven torero local, Saúl Mialdea, que actuó como sobresaliente como la normativa establece cuando se programa un festejo con dos espadas.
FICHA DEL FESTIVAL TAURINO
Plaza de Toros de Villar de Olalla (CUENCA). Domingo 10 de septiembre. Lleno aparente en los tendidos en una tarde agradable.
Novillos de la ganadería de Navalrrosal (1º,2º y 3º), de buena presencia pero desclasados, y el 4º de la ganadería de Hermanos Quintas, sin llegar a ser completo, resultó ser el ejemplar que más juego dio del encierro.
Aitor Darío "El Gallo": palmas tras tímida petición y silencio
Sergio López: palmas y silencio
PARTE FACULTATIVO DE LA COGIDA DE AITOR DARÍO "EL GALLO" ASISTIDO EN EL QUIRÓFANO MÓVIL DE LA PLAZA DE TOROS DE VILLAR DE OLALLA:
"Es atendido de un puntazo en el escroto, que requiere 4 puntos de sutura, con anestesia local. Al mismo tiempo se le asiste de una herida limpia de 12 cm, superficial en la base del muslo izquierdo que interesa tejido celular subcutáneo, sin afectar vasos".
Tratamiento: Limpieza y lavado de la herida, desbridamiento y sutura quirúrgica que requiere 12 puntos de sutura, con drenaje y profilaxis antibiótica.
Pronóstico: Leve, que no le impide continuar la lidia.
Firmado: Dr. Rosales, cirujano jefe de la Plaza de Toros de Villar de Olalla.
Si (
No(
