Tras varias horas de arduas tareas, por parte de los profesionales del Ejército del Aire, la cabina de este cazabombardero, que tiene un peso aproximado de 8 toneladas, ha quedado colocada en la parte derecha de la fachada del Palacio Provincial, al lado de uno de los motores de otro Phantom y frente al avión militar histórico T-6 Texan, que llegaron el pasado lunes, 12 de junio.
De esta manera, los jardines de la Diputación se han convertido por unos días en una pequeña muestra del Museo de Aeronáutica y Astronáutica del Ejército del Aire, junto a la exposición ubicada en el Salón de Actos del Palacio, donde se pueden encontrar desde una veintena de maquetas de aviones que han formado parte de la historia de la aeronáutica española hasta libros, cascos de piloto y una selección de palancas de mando de diversos aviones, pasando por varios dioramas y una impresionante maqueta del Cuartel General del Aire en Madrid.
Desde un primer momento, la cabina del Phantom ha despertado bastante expectación entre los ciudadanos que se han acercado hasta la Diputación para conocer la exposición. Y es que no hay que olvidar que los visitantes pueden subirse a ella y comprobar qué siente un piloto de este cazabombardero.
Precisamente, ante la previsible afluencia de público, se ha decidido ampliar el horario de la exposición, que estará instalada hasta el próximo domingo, 18 de junio, pudiendo ser visitada todos los días de 10 a 14 y de 18 a 21 horas; y, por lo que respecta a la cabina del Phantom F-4, se podrá subir a ella de 10 a 13 y de 17 a 20 horas.
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