El pintor almeriense Pepe Checa muestra su obra pictórica en Cuenca, bajo el título de ‘Luz y color’, a partir de este viernes 28 de abril en ‘Enmarcaciones Rococó’ (C/ Diego Jiménez, 3) y hasta el día 25 de mayo. La inauguración, a la que están invitados todos los conquenses, tendrá lugar a las 20 horas y durante la misma se invitará a los presentes a un vino de honor.
El paisaje es uno de los principales motivos que predomina en la obra de Pepe Checa, mostrando especialmente escenas típicas de su Almería natal, pero también de conocidos espacios de Cuenca.
Sobre su obra, el artista señala que “mi intención en la pintura es captar las luces y sombras precisas en cada momento, pues creo que la característica primordial que dota a una obra de vida es la inclusión adecuada de dichas luces y sombras”. Y añade que “pretendo así crear composiciones lo más perfectas y armonizadas posible”.
Para Checa “todo en esta creación vibra y te hace sentir. La única diferencia está en nuestra percepción de las cosas, en nuestra capacidad de unir las piezas de un modo totalmente nuevo y ver patrones allí donde un momento antes no había más que sombras”. Porque, dice, “todo es de color: rojos, amarillos, azules, bermellones, naranjas y, como en la vida o en el amor, el corazón manda, no se razona; se siente, se vive”.
Pinceladas de su vida
Pepe Checa, nacido en Almería en 1959, creció en un ambiente cercano a la pintura y a la música, influenciado en este arte por su abuelo Hilario Checa Sánchez, reconocido pintor de finales del siglo XIX y principios del XX, y profesor de la Escuela de Artes de Almería.
Tuvo sus primeros pinceles a la edad de 9 años y la pintura se convirtió enseguida en su gran obsesión. Centró sus estudios en este arte, desarrollando su labor profesional en distintos estudios y empresas de diseño y arquitectura.
Ha participado en numerosas exposiciones, tanto individuales como colectivas, y su obra está repartida por España, Marruecos, Emiratos Árabes, Nueva York, París o Italia.