La Plaza Cervantes, y en concreto el Palacio del Carnaval, fue el lugar elegido para la tradicional sardinada, en la que se asaron 140 kilos de sardinas. La organización corrió a cargo del Ayuntamiento de la localidad, aunque contaron con la colaboración de los usuarios del Centro de Mayores y del club de Petanca, que fueron los encargados de elaborar “la zurra y el agua de limón”.
Representantes de las 4 peñas más destacadas, Peña Fiestalegre, Andrés Segovia, Los Dementes y Los Perchas fueron los encargados de preparar el fuego e ir haciendo y repartiendo las sardinas al numeroso público que allí se congregó.