En 2009, tras una disputa urbanística entre el PSOE y el PP sobre la ubicación del nuevo Hospital, con recalificaciones para muchas viviendas incluidas en el paquete, se aprobó un Plan de Singular Interés (PSI) en la zona de “El Terminillo” en la que se construiría el nuevo Hospital, que planteó el PSOE que gobernaba la Diputación, propietaria de los terrenos. A este PSI, el PP que gobernaba el Ayuntamiento nunca se opuso.
En 2011 se paralizó la obra, cuando ya se habían invertido unos 20 millones de euros entre la urbanización y las propias obras del nuevo Hospital. Por ello, desde IU creemos que PP y PSOE deben aclarar algunas cuestiones:
¿Por qué se pararon las obras del nuevo hospital? Si no había dinero para continuar ¿por qué no se resolvió el contrato? ¿Es que existe algún acuerdo de suspensión de las obras con las constructoras a las que se adjudicó la obra en el año 2010? ¿Cuanto dinero se les debe?
Si finalmente se construye el nuevo hospital, ¿qué se va a hacer con el Virgen de la Luz? ¿Tendremos otro edificio similar a las nuevas sedes de patronal y sindicatos?
¿Es de verdad necesario construir un nuevo hospital, que necesita una inversión de unos 120 millones de euros, según el proyecto aprobado en su día, cuando hay necesidades a corto plazo en la sanidad pública que es necesario satisfacer?
Hasta que no se elaboren los presupuestos de la Junta de Comunidades para 2016 no habrá respuestas veraces para estas preguntas. Pero hasta entonces, IU advierte de las implicaciones que para la política municipal puede suponer el hecho de que se construya en esa zona de “El Terminillo” el nuevo hospital.
Cuando se sometió al trámite de información pública el PSI, colectivos de esta ciudad plantearon alegaciones advirtiendo que las previsiones que estaban contempladas en el proyecto de Plan de Ordenación Municipal, consistentes en el traslado de la Depuradora de Aguas Residuales y la conexión con la ciudad no se iban a cumplir, por lo que era un despropósito ubicar allí el nuevo Hospital, cuando había y hay en la ciudad suelos públicos suficientes para albergarlos.
El Gobierno regional de entonces, en la aprobación definitiva del PSI en 2009, atendiendo a estas alegaciones, se comprometió a financiar y a ejecutar el traslado de la depuradora y a la construcción de los viarios necesarios para conectar con la ciudad.
Por ello quedan más preguntas pendientes: ¿Va a cumplir el gobierno regional con su obligación de financiar estas actuaciones, que serían necesarias, a la vez que construye el nuevo hospital en esa zona? ¿Quién se va a hacer cargo de los costes de los servicios de transporte y de otro tipo que habría que implantar de construirse en esa zona el nuevo Hospital? ¿Cómo se va a financiar el traslado de la Depuradora? ¿Repercutirá en las tasas que pagamos la ciudadanía de Cuenca? ¿Tendrá el Ayuntamiento de Cuenca que destinar recursos económicos a estas actuaciones?
IU exigirá en todo momento que estas decisiones adoptadas al margen y en contraposición de la definición de un modelo de ciudad sostenible para Cuenca, no supongan ningún esfuerzo económico más, ni a las arcas municipales, ni a la ciudadanía de Cuenca.
Si (
No(
