Martínez Guijarro ha asegurado que ya se han iniciado los contactos con las empresas adjudicatarias para planificar el reinicio de estas obras. En cuanto a los plazos, ha señalado que la estimación es que duren entre cinco y seis años entre la construcción, el equipamiento y el traslado de un edificio a otro.
El número dos del Ejecutivo regional considera que esta decisión va a tener su incidencia en la planificación sanitaria de la provincia de Cuenca a medio y largo plazo, pero que tendrá una incidencia inmediata en la reactivación de la actividad económica de la ciudad. “Creemos que la recuperación de la obras del hospital puede servir como motor para la reactivación de la actividad económica aquí, en la ciudad de Cuenca”, ha insistido.
Paralelamente, el Gobierno de Castilla-La Mancha va a trabajar en la recuperación de servicios que se han perdido en el hospital Virgen de la Luz de Cuenca durante los últimos cuatro años, e incluso en el incremento de algunos que se ubicarían en el actual edificio hasta que esté operativo el nuevo hospital. Así lo ha explicado Martínez Guijarro, que ha adelantado que la hoja de ruta a seguir será el compromiso que asumió el presidente, Emilio García Page, con los profesionales del centro sanitario.
Preguntado por los periodistas sobre la sustitución del gerente del Hospital Virgen de la Luz, el vicepresidente ha dicho que la Consejería de Sanidad está trabajando en la renovación de los equipos directivos de los diferentes hospitales de la región, también del de Cuenca. Una renovación que “se va a producir con absoluta normalidad”.