Martínez se pronunciaba de esta manera después de que el primer edil de esa localidad conquense llamara “puta barata podemita” a Maestre en respuesta a una información del diario digital CLM24 en la que la portavoz regional socialista pedía al PP que dejara trabajar al actual Gobierno regional.
En opinión de la directora del Instituto de la Mujer, “llevar el debate político al insulto personal es lamentable, pero hacerlo en estos términos es aún peor”. Es más, sostenía que “los responsables políticos, y más los que ostentan un cargo público, no solo deben cumplir la ley, sino dar ejemplo, que es justo lo contrario de lo que ha hecho este alcalde”.
Araceli Martínez definía como intolerable “el machismo” que denotaba el comentario y, además, no dejaba pasar por alto el grado de “violencia verbal” con los adversarios políticos de otras expresiones vertidas en el mismo comentario que no hacían ya referencia directa a Cristina Maestre como política y como mujer.