Las semifinales de esta competición pusieron de manifiesto los problemas para confirmar la supremacía de los pesos pesados del panorama billarístico conquense. Esto viene a demostrar, sin duda, la progresión llevada a cabo por algunos jugadores, como es el caso de Gregorio Guijarro, quien, poco a poco, se va haciendo un pequeño hueco entre los grandes de la competición, luchando de tu a tu ante uno de los favoritos, Javier Mora, e incluso poniéndole en muy serios apuros su pase a la gran final.
Confirmada la calidad de David Ortega, quedaba por saber si su ascendente estado de forma sería suficiente para apear a José Mª Martínez de la lucha por un título del que era vigente campeón. El enfrentamiento entre ambos fue intenso e igualado, pero Chema demostró más empaque y supo controlar el tempo del partido para llegar al duelo decisivo por tercera vez consecutiva.
A pesar de los pesares, una vez más, y van tres en los últimos cinco años, JAVIER MORA y JOSÉ Mª MARTÍNEZ, acabaron siendo los protagonistas de una final que se esperaba mucho más competida de lo que realmente acabó siendo, encontrando Javier menos problemas de los previstos para relevar a su amigo Josema en el trono de esta tradicional competición navideña de un deporte tan interesante, bonito y espectacular como es el Billar a Tres Bandas.
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