En principio este plan finalizaba el pasado mes de diciembre, pero ha sido renovado por la consejería de Fomento hasta el fin del presente mes o hasta agotar el dinero destinado a esta ayuda.
Los usuarios que estén interesados en cambiar su caldera antigua que utilice combustible no catalogado por otra de condensación que utilice gas natural o gases licuados del petróleo. También están sujetas a subvención las calderas individuales que utilicen gasoil por otras calderas de condensación que funcionen con este mismo combustible.
Desde ACOIN señalan que estas ayudas sólo se podrán realizar mediante empresas instaladoras que se hayan acogido a la iniciativa y la administración haya verificado su habilitación.
Cuantía de la subvención
La cuantía de la subvención puede llegar a cuatrocientos euros, aunque en ningún caso podrá exceder el 30% del coste de la sustitución de la caldera, incluyéndose aquí el precio final del aparato y su instalación, IVA incluido.
Eso sí, las nuevas calderas deberán ser instalaciones individuales domésticas y tienen que haber sido establecidas previamente por la Consejería de Fomento como calderas eficientes.