Alternándose en sus orígenes dichos estivales conciertos con los interpretados por la antigua Banda Provincial, éstos solían tener lugar en entrañables rincones conquenses como la Plaza Mayor o la Fuente del Escardillo, puesto que no sería hasta el año 1922 y bajo la excelente batuta de D. Nicolás Cabañas, cuando fuese construido el famoso “quiosco” del Parque S. Julián, obra del arquitecto Fernando Alcántara.
Algunos pequeños y curiosos cambios han tenido lugar en dichos conciertos, a lo largo de sus más de cien años de historia, como fue el hecho de anotar en una pequeña pizarra, las obras musicales que esa noche iban a ser interpretadas.
Es difícil cuantificar el sublime trabajo brindado por nuestra muy querida Banda Municipal de Música a la Ciudad de Cuenca, así como a su bella “Oliva” en la “Noche Blanca”. Este trabajo únicamente es posible bajo el fantástico marco humano que la Banda presenta, el cual volverá a materializarse con la excelente batuta de D. Juan Carlos Aguilar, el próximo sábado a las 23.00 horas en el Parque S. Julián, como resulta acorde con la tradición.
Miguel Ángel Martínez Valiente