Izquierda Unida de Castilla-La Mancha, y concretamente desde su área de educación, han valorado esta tarde la aprobación, por parte del Consejo de Ministros, de la reforma educativa conocida como LOMCE. Esta aprobación, que llega una semana después tras ser postpuesta gracias a la movilización ciudadana en una jornada de Huelga educativa histórica, ha confirmado todos los puntos negativos de dicha reforma e, incluso, ha ido un poco más allá en algunos aspectos.
Además, lejos de reducir la polémica en alguno de los puntos sensibles de la reforma, el gobierno ha decidió echar más leña al fuego y ceder a las presiones históricas de la Conferencia Episcopal y, a partir de ahora, la Religión Católica volverá a computar, teniendo el mismo tratamiento que las demás materias e influyendo, por tanto, a efectos de repetición de curso u obtención de becas.
Jacobo Medianero, responsable del Área de Educación, ha mostrado su sorpresa ante este hecho y ha recordado que este tratamiento nos devuelve a la Ley General de Educación que fue aprobada durante la dictadura franquista allá por 1970 y eliminada con la LOGSE.
De esta manera, Medianero ha sido crítico con que el PP haya puesto en marcha la mercantilización de la Educación y ha recordado que la Reforma Educativa arranca con la comunidad educativa en contra y esto nunca es un buen comienzo para una ley.
Por último, la formación ha asegurado que queda pendiente el problema de la financiación, como advirtió el Consejo de Estado, y que tampoco se ha escucha a este órgano en relación con educación para la ciudadanía. Por último, y entre las múltiples cuestiones perniciosas de la norma, se han confirmado los conciertos con colegios que segregan alumnado por sexo.
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