Según Hidalgo, una vez que se ha conocido que el plan ha sido aprobado, ha quedado demostrado que Ávila se había inventado un culpable para evitar asumir el fracaso de su gestión. Para el portavoz del PP es una buen noticia que el Ministerio haya dado una oportunidad al ayuntamiento, ya que de no ser así, las cuentas municipales se iban a ver seriamente comprometidas.
Para los populares, esta es una prueba más de la apuesta decidida que está haciendo el gobierno de Mariano Rajoy por los ayuntamientos para que estos puedan salir de la crisis y pagar sus deudas a proveedores. Consideran que el Ministerio de Hacienda ha sido benevolente con el Ayuntamiento de Cuenca al saber de su situación y a pesar de que el plan presenta dudas razonables sobre su cumplimiento.
Asimismo, Hidalgo confirma que su grupo también ha hecho gestiones a todas las instancias para que este grave problema que suponía el rechazo del plan de ajuste se solucionara lo antes posible y se alegran porque el trabajo de todos haya dado sus frutos. Entre esos contactos, el portavoz del PP ha reconocido haber hablado con responsables del Ministerio para que repensaran su negativa, ya que ésta supondría un revés muy importante para el consistorio conquense.
Desde el PP explican que el Ministerio ha exigido al ayuntamiento que apruebe el presupuesto para que se pueda ratificar el plan de ajuste, tal y como había solicitado el Grupo Popular en numerosas ocasiones.
Los populares consideran que con esta aprobación final ha quedado de manifiesto que nada tenía que ver la anterior gestión en la decisión del ministerio y que Ávila se inventó un culpable para salir indemne una vez se conoció que su plan había sido rechazado. Por ello, desde el PP exigen a Ávila una rectificación pública donde reconozca que en la decisión primera ni en esta ha estado vinculada al plan de saneamiento aprobado en 2009 como quiso hacer ver el alcalde.
En cualquier caso y a pesar de que el Ministerio ha hecho un importante esfuerzo aprobando este plan, desde el PP manifiestan que Ávila debe reflexionar sobre la situación a la que está llevando la economía municipal y plantear nuevas medidas que garanticen los servicios a los ciudadanos.
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