La tercera edición de la Escuela Capuchina de Tarancón concluyó con una Procesión Infantil que reunió a cientos de niños vestidos de hermandades. A pesar del mal tiempo, el evento, promovido por la Junta Mayor de Hermandades, destacó la devoción y tradición local, acercando a los jóvenes a su cultura.
La tercera edición de la Escuela Capuchina de Tarancón ha llegado a su fin este sábado con una la Procesión Infantil que ha recorrido las calles del casco antiguo de la ciudad. Esta iniciativa, promovida por la Junta Mayor de Hermandades, ha logrado congregar a centenares de niños y niñas vestidos con las túnicas representativas de las distintas hermandades y cofradías locales.
Los más pequeños han sido los protagonistas de esta jornada, portando a hombros imágenes y réplicas de los pasos más emblemáticos de la Semana Santa taranconera, en una muestra de devoción, tradición y aprendizaje.
A pesar de la meteorología adversa, el cortejo ha estado arropado en todo momento por numeroso público, que no ha querido perderse este entrañable acto de clausura. Un evento que, año tras año, se consolida como una oportunidad para acercar a los más jóvenes a las tradiciones religiosas y culturales de la localidad.