El Barrio de la Fuente del Oro celebró la procesión de San Julián, con cientos de vecinos participando a pesar del frío. Tras una eucaristía, el concejal y miembros municipales se unieron al desfile, que culminó con el reparto de panecillos típicos en honor al patrón de Cuenca.
El Barrio de la Fuente del Oro vivió este martes una jornada de fervor religioso con la tradicional procesión de San Julián, que recorrió las calles del barrio al caer la tarde. La imagen del santo salió de su parroquia para ser acompañada por cientos de vecinos que, a pesar del frío, no quisieron faltar a esta significativa celebración.
La procesión comenzó pasadas las siete de la tarde, tras la celebración de la eucaristía en la parroquia del barrio. Vecinos de todas las edades se unieron a la marcha, reflejando la devoción que genera la figura de San Julián.
El concejal Adrián Martínez Vicente, acompañado por otros miembros de la Corporación Municipal, participó en la misa en honor a San Julián. Después, todos se unieron al desfile procesional, que recorrió las principales calles del barrio, celebrando la figura del patrón de Cuenca.
Como parte de la tradición, al finalizar la procesión, se llevó a cabo el reparto de los típicos panecillos del Santo.