El BM Cuenca se estrenó en el torneo doméstico con una convincente y superlativa victoria ante el Granollers, decano de la Liga Plenitude Asobal.
El equipo de Lidio Jiménez disfrutó e hizo disfrutar. Muy impetuoso, desde los primeros compases del partido, tumbó a su oponente, con una actuación muy coral repleta de hambre y ambición, endosándole casi cuarenta goles a un gran e histórico equipo que recientemente se clasificó para jugar la Fase de Grupos de la EHF EUROPEAN LEAGUE.
La primera parte se caracterizó fundamentalmente por la igualdad y un asiduo intercambio de golpes. Pero tras unos minutos de trabajo defensivo sublime por parte de los castellanomanchegos, unido a su gran nivel exhibido en ataque, les permitió cobrar una ventaja de tres goles (8-5) que al final de los primeros treinta minutos vieron minimizada a la máxima expresión (18-17).
La segunda parte empezó con un parcial a favor de los vallesanos, que voltearon el marcador en un abrir y cerrar de ojos (18-20). Pero más allá de venirse abajo, el equipo de la ribera del Júcar tiró de casta y, atravesado el ecuador de este segundo acto, volvió a mandar en el luminoso (27-26, minuto 46).
La tremenda igualdad en el choque presagiaba un final de infarto, pero en el tramo final, espoleado siempre por su animosa afición, Cuenca pegó el arreón decisivo y definitivo para despegarse por cuatro goles (32-28), obligando a Antonio Rama a pedir su último tiempo muerto, a menos de ocho minutos para el final, con el objeto de recomponer a los suyos e intentar una remontada épica que se antojaba difícil pero no imposible teniendo en cuenta el potencial del cuadro catalán.
Pusieron toda la carne en el asador hasta el final los granollerenses, pero sin éxito; pues Cuenca venció por 38-35 con un Pedro Tonicher que resultó decisivo con sus meritorias 16 paradas, entre ellas, un siete metros detenido a Antonio García Robledo.
En un encuentro en el que mayoritariamente reinó la igualdad, la portentosa actuación del prometedor cancerbero luso decantó la balanza a favor de los locales; que además a las primeras de cambio se ha metido a la afición verde en el bolsillo, dedicándole ésta (especialmente la Peña Furia Conquense), en cada una de sus intervenciones, la archiconocida canción de la cantante Rafaella Carrá denominada Pedro, Pedro, Pedro, Pedro, ¡Pe!…
No menos importante, en el bando local, fue la actuación de un sobresaliente Rudolph Hackbarth que estuvo colosal al igual que el cañonero carioca Guilherme Perbela; sin olvidar las actuaciones notables de jugadores como el canterano Álvaro Martín, Auréliem Tchitombi, y también de un “delicatessen” Fede Pizarro que, en los momentos importantes del partido, sacó a relucir su calidad y galones.
En definitiva, el Cuenca empezó este vigente curso con el pie derecho: ganando y dejando un excelente sabor de boca entre su afición, que se fue muy feliz de la “caldera” de El Sargal.
Ficha técnica
38. BM. Cuenca (18+20): Pedro Tonicher; Nacho Pizarro, Pozzer (3), Fede Pizarro (7), Santi Barceló (1), Tchitombi (5), Hackbarth (7, 2p), siete inicial, David Mach (p), Dani Neves (2), Álvaro Martín (4), Sergio López (3), Perbela (6) y Tavares.
35. Fraikin Granollers (17+18): Roberto Rodríguez; Iván Montoya (3), Andrés Moyano (6), Jordi Deumal (4), Ferrán Castillo (3), Pablo Urdangarín (2), Antonio García (8, 4p), siete inicial, Víctor Romero (3), Tarcisio Freitas (1), Abrahao (3), Gerard Domingo (1) y Pablo Guijarro (1).
Árbitros: Colmenero Guillén y Rollán Martín. Excluyeron, por parte local, a Pozzer, Perbela, Hackbarth, Tchitombi y Fede Pizarro. Por parte visitante a Pablo Urdangarín, Freitas y Víctor Romero (2).
Marcador cada cinco minutos: 2-3, 6-5, 8-7, 12-11, 13-15, 18-17, descanso, 19-20, 21-23, 25-26, 29-27, 34-30 y 38-35.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera jornada de la liga Plenitude Asobal disputado en el polideportivo El Sargal ante unos 1.100 espectadores.