Evaluar si el entrenamiento cognitivo y la práctica de ejercicio tiene algún efecto sobre la fragilidad y la prevención de la dependencia en el anciano es el objetivo de este proyecto de investigación que están llevando a cabo profesionales de enfermería y fisioterapeutas del Área Integrada de Cuenca y está coordinado por Blanca Notario Pacheco, del Centro de Estudios Sociosanitarios y Beatriz Cervera Monteagudo, responsable de Enfermería de la Unidad de Docencia, Formación, Investigación y Calidad de la Gerencia del Área Integrada de Cuenca.
Para el desarrollo del estudio se identificó a personas mayores de 70 años que acuden a los tres centros de salud y a los centros de mayores de la capital conquense y se les ofreció la posibilidad de participar en el estudio.
Aleatoriamente se crearon tres grupos para la intervención con los mayores. Con los participantes del Centro de Salud “Cuenca I” se desarrolla en uno de los Centros de Mayores de Cuenca un taller de ejercicio físico de una hora de duración, dos días en la semana.
Por su parte, otro de los grupos --el de mayores del Centro de Salud “Cuenca IV”-- participan dos días por semana en un taller de entrenamiento cognitivo en la Biblioteca del centro sanitario, mientras los que se integran en el grupo del Centro de Salud “Cuenca II” reciben las dos intervenciones durante dos horas, también dos días a la semana.
Los talleres comenzaron en el mes de abril y tienen una duración aproximada de tres meses. El objetivo es realizar una primera evaluación a los tres meses y otra nueva valoración transcurrido un año de las intervenciones realizadas.
Hasta el momento y de manera subjetiva, la mayoría de los participantes han expresado su satisfacción por la participación en estos talleres que han tenido una buena acogida entre las personas mayores de 70 años del Área de Salud de Cuenca y con su evaluación se intentará demostrar los beneficios del ejercicio físico y del entrenamiento cognitivo para la prevención de la dependencia en los ancianos.