Esta pasada semana el presidente de la Diputación Provincial, Benjamín Prieto, recibió en su despacho al subdelegado del Gobierno de España, Ángel Mariscal, en la que fue la primera reunión oficial de ambos dirigentes tras la designación de Mariscal. En el encuentro ambos dirigentes abordaron la marcha de programas comunes, como el Plan de Vialidad de las carreteras, o los Planes Provinciales que este año permitirán el arreglo de tres carreteras provinciales.
"Aunque nos conocemos sobradamente, no quería inciiar mi ronda de presentaciones por las diferentes administraciones de la capital sin pasar por la Diputación Provincial, que ha sido mi casa estos últimos cuatro años y medio" explicó Mariscal. El subdelegado aprovechó el encuentro para "ratficar" la necesidad de las diputaciones "y más en una provincia como Cuenca, con una gran dispersión demográfica y con un importante patrimonio monumental y natural". Mariscal si subrayó la necesidad "de que se delimiten y clarifiquen las competencias de cada una de las administraciones".
Por su parte, Prieto agradeció la visita de Mariscal, al que le mostró su deseo de colaborar "con lealtad" desde la Diputación Provincial, "en todas aquellas inciativas que supongan el desarrollo de la provincia". El priesidente de la Diputación se alegró "de contar para esta misión, con un verdadero aliado al frente de la subdelegación del Gobierno", y subrayó el papel que desempeña esta institución en aspectos tan sensibles en la provincia "como la lucha contra la criminalidad en el ámbito rural, algo de lo que sé, ya se está ocupando Ángel Mariscal".