En cuanto a este producto, desde 2007 hasta el presente año, la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales ha realizado 128 actuaciones, de las que 97 han sido por notificaciones de red de alerta, once por campañas de control y dos de oficio.
Para la toma de muestras se han seleccionado aleatoriamente un total de 23 artículos en el mercado, de los cuales sólo dos tenían irregularidades en su etiquetado, pero no en cuanto a seguridad.
La importancia de comprobar el etiquetado del material escolar
Del mismo modo, la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales, a través de la Dirección General de Salud Pública, Drogodependencias y Consumo, también ofrece recomendaciones sobre productos de uso escolar.
En primer lugar, es importante revisar el material y su etiquetado para garantizar la seguridad de los niños en las aulas.
El etiquetado de este tipo de productos debe contener el nombre o denominación comercial del producto; el nombre o razón social del fabricante, distribuidor, vendedor o importador y su domicilio; e incluir advertencias de seguridad e instrucciones de uso si es necesario.
En el caso de los pegamentos, pinturas y otros productos que puedan resultar tóxicos su composición debe figurar en la etiqueta así como los símbolos e indicaciones de peligro.
Por otra parte, en los productos escolares que sean considerados juguetes (témperas, plastilina, barras óleo-pastel, acuarelas, rotuladores o pinturas para dedos) el etiquetado también incluirá el marcado CE, que indica la conformidad del producto con los requisitos de seguridad de la UE y, si los artículos son muy pequeños, la advertencia de que no son adecuados para menores de 36 meses.