El consejero ha señalado que este año se impartirán 96 cursos frente a los 43 ofrecidos en 2011. No obstante ha señalado que “aunque se han incrementado los cursos en más del doble, los cursos se realizarán con un presupuesto prácticamente igual al que concurría en el ejercicio anterior, una cantidad que se sitúa en 430.000 euros”.
Asimismo, Labrador ha señalado que la tipología de los cursos que se van a impartir es “sumamente variada”, ya que el principal objetivo es “atender las demandas que han planteado los responsables de los colectivos a los que van dirigidos durante las reuniones que han mantenido con los responsables de la dirección general de Protección Ciudadana”.
“El objetivo es que estas enseñanzas contribuyan a perfeccionar al máximo el desempeño de la labor profesional de estos colectivos”, ha señalado.
Sobre este asunto, Labrador ha subrayado, además, que una de las novedades de este año es que los cargos electos que así lo soliciten, podrán recibir formación acerca de espectáculos públicos y festejos taurinos.
Asimismo, el consejero ha destacado que este año, por primera vez, tras la finalización de los cursos, se expedirán certificados de profesionalidad homologados y válidos en cualquier ámbito profesional.
Apoyo a los ayuntamientos
Durante su intervención Labrador ha explicado que la formación que impartirá este año la EPC es un ejemplo más de la “colaboración y el constante apoyo que el Gobierno de María Dolores Cospedal quiere prestar a los ayuntamientos de la región”.
“Además de las acuciantes necesidades económicas, las entidades locales necesitan contar con la cooperación y el apoyo de la administración regional en otros muchos ámbitos”, ha afirmado.
Cuerpo docente
Con respecto al cuerpo docente que impartirá esta formación, Labrador ha afirmado que “el Gobierno regional reitera una vez más su confianza en los empleados públicos y apuesta por ellos para ejercer este tipo de actividades, para las que se requiere el máximo nivel de profesionalidad, así como la acreditación de experiencia y titulación que demuestren la capacidad docente y la formación pedagógica de cada profesor”.
En este sentido, Labrador ha explicado que para el desarrollo de estos cursos se incorporarán nuevos métodos de enseñanza, “para garantizar una asimilación óptima y constante de los conocimientos”. Así, las prácticas tendrán un protagonismo superior al de las tradicionales clases magistrales y los alumnos recibirán sus calificaciones mediante un proceso de evaluación continua.
Sobre este último asunto, ha destacado que la estrategia formativa seguirá las directrices fijadas en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) desarrollado en el proceso de Bolonia.