El programa de actos religiosos con motivo de la Semana Santa de Mota del Cuervo tuvo ayer su arranque con la celebración de la procesión del Viernes de Dolores, organizada por la Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad. La marcha, partió de la Iglesia Parroquial San Miguel Arcángel y recorrió algunas de las calles principales de la localidad.
Último viernes de cuaresma, caía la tarde y las campanas del templo anunciaban la salida de la Virgen de la Soledad representando el dolor de una madre que sabe que su hijo morirá en la cruz.
El público siguió la procesión en absoluto silencio y devoción. La imagen iba acompañada por varias mujeres vestidas con mantilla que abrían junto con la cruz de guía, el paso de la Virgen portada a hombros por más de más de 50 porteadores que marcaban el paso con sus horquillas.
Detrás de la imagen la banda de música de la Asociación Musical Moteña le puso el sonido y la emoción a la procesión, que cerraban el párroco de la localidad, José Luís Benito Huete, los miembros de la Junta de Cofradías, autoridades y feligreses.
ISABEL ZARCO