La citada ordenanza contempla sanciones de entre 750 y 1.500 euros según la gravedad de la infracción. Además establece que “el Ayuntamiento, subsidiariamente, podrá limpiar o reparar los daños causados por la infracción, con cargo a la persona o personas responsables y sin perjuicio de la imposición de las sanciones correspondientes”.
Estos hechos tuvieron lugar en la tarde del 8 de diciembre.
Otros dos “grafiteros” fueron denunciados en septiembre en octubre, entonces por hacer pintadas en muros de las calles Ricardo Ortega y Paseo del Ferrocarril.