Una iniciativa, que se enmarca dentro de los actos de conmemoración del 20 aniversario de la Universidad Politécnica de Cuenca, para concienciar a la población de que la mejor energía es la que no se consume, con el objetivo de hacer patente que el aislamiento térmico de los edificios es el mejor camino para implantar soluciones energéticamente eficientes que ayuden a reducir la factura energética y proporcionen a sus habitantes un confort placentero, respetando el medio ambiente.
Durante el Desafío del Aislamiento, se situarán dos maquetas de dimensiones exactamente idénticas en el Parque San Julián –Centro Cultural CCM-, sin ningún tipo de sombra o afección externa: en cada una de las maquetas, que simulan dos viviendas (una aislada correctamente con productos Isover, siguiendo los principios de las casas pasivas y la otra sin aislar) y se colocarán dos cubos de hielo de 1 m3 cada uno de ellos.
El desafío consiste en predecir cuántos litros de hielo se derretirán de cada casa expuesta a la radiación solar. Todos los asistentes podrán participar realizando sus apuestas. Al final del evento se darán a conocer los ganadores de las apuestas que entrarán en un sorteo de una Tablet, 10 USB y 15 cuadernos Isover.
Isover continúa apostando por este tipo de iniciativas, tratando de sensibilizar a la opinión pública sobre la importancia de la eficiencia energética en los edificios y demostrando que la energía más barata es aquella no consumida, no necesita ser generada, importada o pagada. Este es el concepto básico de las casas basadas en el diseño Multi Comfort House de ISOVER donde en periodos calientes, el perfecto aislamiento térmico hace que la demanda de refrigeración, para obtener una temperatura interior placentera, se reduzca hasta en un 90%.