Entre concejales que dimitieron y suplentes que se negaron sustituirles, el PSOE de Priego ha quedado reducido a un pequeño grupo de dos concejales que tratan de hacer oposición en el Ayuntamiento. Una vez se agotó la lista con la que se presentó a las elecciones, el partido buscó sustitutos entre los vecinos de Priego, pero ninguno de ellos aceptó la propuesta. Es entonces cuando la Dirección provincial del PSOE tendría que haber designado de entre su equipo a dos concejales (no necesariamente vecinos del pueblo) que, al menos, asistieran a los Plenos para garantizar que el PSOE tuviera la fuerza que le corresponde tener. Es esta la solución que se ha adoptado en algunos casos, pero no en Priego, y ello a pesar de que los concejales socialistas pidieron ayuda a Carmen Torralba, diputada regional del PSOE, en diciembre de 2016.
Las Cuatro Esquinas ha tratado de conocer en varias ocasiones los motivos por lo que el PSOE de Cuenca ha decidido no ayudar a sus compañeros pricenses. El gabinete de prensa del partido respondió el pasado mes de abril que no querían pronunciarse sobre esta cuestión ni tampoco sobre la reciente dimisión de la líder del PSOE de Priego, Isabel Giménez. Y desde entonces, la única novedad al respecto es que los socialistas pricenses siguen estando solos en esta aventura y que asistirán al Pleno de julio en esta precaria situación, un panorama que les impide bloquear algunas de las políticas adoptadas por la alcaldesa, algo que podrían hacer si tuvieran dos concejales más y la ayuda de Nicolás Cano. En total sumarían cinco concejales frente a los cuatro de la Alcaldía.
Gabriel Arias