La secretaria de Educación de la Ejecutiva Provincial del PSOE de Cuenca, Julia Cano, ha calificado de “ofensivas, demagógicas y que reflejan un desconocimiento absoluto de la realidad” las declaraciones que realizó ayer el consejero del ramo, Marcial Marín. Según ha explicado, “un responsable político no puede decir públicamente que aplicará una medida, como es la de cerrar la escuela de un pueblo, en función de las demandas de los administrados, porque puede esconder la intencionalidad de aplicar las medidas con criterios partidistas: cierro escuelas donde gobiernan los adversarios y las mantengo donde gobiernan los míos”.
Cano ha apuntado que, por “supuesto que las familias pueden opinar legítimamente que prefieren para sus hijos un colegio grande en el pueblo de al lado porque creen que favorece la socialización de sus hijos, porque no hay grandes distancias y las comunicaciones son buenas, por ejemplo”; es más, expone, que ya existen casos de este tipo, pues familias de La Melgosa, Mohorte o Palomera envían a sus hijos a Cuenca, al igual que municipios como Rozalén del Monte, Alcázar del Rey o Paredes se han quedado sin alumnos porque las familias decidieron enviar a sus hijos a Tarancón.
Eso sí, ha añadido, “es un disparate total, además de una gran mentira o reflejo de la ignorancia, con la gravedad que eso supondría en un consejero de Educación, decir que en los colegios más grandes los niños recibirán 25 horas lectivas mientras en las escuelas pequeñas solo reciben tres o cuatro”.
Antes estas declaraciones, la responsable socialista ofrece al consejero de Educación “una clase práctica que cualquier maestro de una escuela rural le puede impartir para explicarle cómo se organiza una escuela unitaria o mixta, cómo los niños comparten sesiones didácticas y cada cual realiza las tareas en función de sus capacidades y no del curso en el que se inscriben, del aprendizaje entre iguales, del trabajo colaborativo, de la autonomía personal del aprendizaje… Todas ellas estrategias didácticas que los profesionales vienen practicando en las escuelas unitarias desde hace años”.
Y es que, considera Julia Cano, las declaraciones que ayer realizó Marcial Marín “son ofensivas para los docentes porque ponen en duda su profesionalidad, y también para los equipos directivos, que son quienes ponen en marcha medidas organizativas de desdobles de grupos, agrupamientos flexibles y apoyos que mejoran sustancialmente la calidad educativa”. Además, sus palabras “transmiten inseguridad a las familias de los alumnos al cuestionar la calidad de la educación que reciben sus hijos en lo que respecta al número de horas”.
Para terminar, la secretaria de Educación socialista ha zanjado que “hacer esas afirmaciones que parecen proceder de una charla de café con los amigos en vez de ser unas declaraciones serias, técnicas y basadas en la realidad como han de suponérsele a quien es el máximo gestor de la Educación en Castilla-La Mancha, es una irresponsabilidad absoluta”.
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