Después de realizar la donación de sus colecciones bibliográficas y de entregar un ejemplar de cada uno de los ensayos, obras de investigación, novelas y poemarios de los que son autoras, a las 18 h las escritoras alcarreñas impartieron la conferencia "Jesuitas y josefinos en la Historia de San Raimundo" y, hacia las 19 h, se procedió a descubrir la placa en el umbral de la Biblioteca Murialdina.
Laura y María Lara, Primer Premio Nacional de Fin de Carrera en Historia y Premio Algaba, expresaron sentirse "muy emocionadas por el hecho de que los libros con los que ellas han estudiado y han pasado grandes ratos de entretenimiento ahora estén disponibles para la consulta de los vecinos de El Pozo", custodiados por los Josefinos de Murialdo. Repartida por 4 continentes y fundada en Turín en 1873 por San Leonardo ("pionero de la educación especializada de los jóvenes obreros", en palabras de Pablo VI), con la "Congregación de San José" Laura y María se encuentran familiarizadas desde que eran alumnas de catequesis a los 12 años. Por su parte, la iglesia de El Pozo comenzó a funcionar gracias al trabajo de los Jesuitas en los años 50 y 60, bajo la dirección del Padre Llanos, como recuerdan las investigadoras en su libro "Ignacio y la Compañía.
Del castillo a la misión" (Premio Algaba). Asimismo, Laura y María mostraron su profundo agradecimiento a D. Juan José Gasanz, sacerdote josefino y párroco de San Raimundo, y al Padre Franco, superior de la comunidad, por su compromiso social y, en lo relativo a esta jornada cultural, por la feliz iniciativa. Con entusiasmo, manifestaron que "la emperatriz Helena, las brujas y los magos, los templarios, los guerreros de la Reconquista, los oficiales de los Tercios, las meninas y los espías, los héroes del 2 de mayo y el resto de los personajes que pueblan las páginas de sus creaciones están encantados de encontrar ahora nuevos amigos con los que afrontar el día a día a través de tesón y sonrisas". Después de recitar María Lara su nuevo poema, "Armas, letras y barro", compuesto para los lectores de El Pozo, los usuarios de la Biblioteca acogieron con entusiasmo las obras y pidieron a las Hermanas Lara que los visiten con frecuencia para seguir dialogando y reflexionando sobre los retos de la existencia a través de los personajes de la Historia.