Igualmente, señalaba que muchos de esos parados son consecuencia de los despidos que se están produciendo en el sector público de Castilla-La Mancha por las medidas aprobadas por el Gobierno regional. En concreto, afirmó que el desempleo se ha visto incrementado entre los trabajadores de la administración pública en un 41%, mientras que en los servicios sociales la subida ha sido del 182%.
Guijarro ironizó y señaló que De Cospedal va a tener, a partir de ahora, muchas reclamaciones porque no está cumpliendo su promesa electoral cuando en los carteles, dos días antes de las elecciones, puso aquello de “¿Buscas empleo?. Vota PP”.
El portavoz socialista señaló que, “todavía estamos a tiempo para que retire su plan de recortes y presente unos presupuestos que impulsen la actividad económica en Castilla-La Mancha”.
Guijarro realizó estas manifestaciones durante su intervención en el pleno de las Cortes en el que, esta tarde, se debatía la supresión del Defensor del Pueblo de Castilla-La Mancha. Sobre este asunto, denunció la “tramitación irregular” de esta ley e indicó que lo único que van a conseguir con su eliminación “es llevar al paro a otras 20 personas más”.
El responsable socialista no quiso dejar pasar la ocasión para criticar que en la sesión plenaria de esta tarde, por “argucias” del PP no se hayan podido debatir asuntos que preocupan mucho a los ciudadanos como la educación o la sanidad.
Supresión del CES
Por su parte, el diputado socialista Luis Santiago Tierraseca, fue el encargado de defender las enmiendas del Grupo Socialista en contra de la supresión del Consejo Económico y Social (CES).
Tierraseca calificó como de grave error la eliminación del CES, ya que ha sido un órgano que ha demostrado su eficacia, su rigor y ha sido una pieza fundamental en el diálogo y el consenso social. Y se preguntó por qué se elimina esta institución en Castilla-La Mancha cuando en todas las comunidades autónomas se sigue manteniendo. “Si es bueno en el resto de regiones, ¿por qué no lo es aquí?”, argumentó.
El parlamentario socialista afirmó que la explicación es que el Gobierno de Cospedal no quiere “controles” de la ciudadanía ya que le gusta mucho el “ordeno y mando”.
Si (
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