La normativa europea EN 1176 indica que en estas áreas, sólo las alturas de hasta 60 centímetros de caída y de altura sobre el suelo están exentas de suelo amortiguador y podrían instalarse en hormigón, asfalto o acerados. A partir de ahí es necesario un suelo adecuado para evitar daños en los niños. En el caso de Carretería, la instalación supera ampliamente esta altura y ha sido instalado directamente sobre el asfalto.
Los populares consideran que independientemente de esta cuestión, el lugar escogido para ubicar esta nueva área infantil es completamente inadecuado porque no se respeta la distancia del paso de vehículos que estipula la norma, ya que por esa vía siguen transitando algunos de reparto como furgonetas o bicicletas, con el consiguiente peligro.
El PP ha remitido esta misma mañana un escrito al alcalde en el que le exigen que se precinte la instalación y se prohíba su utilización, ya que en cualquier momento podríamos lamentar un accidente o percance de algún niño. Si no se hace de forma inmediata, el único responsable de lo que suceda será el alcalde Juan Ávila.
Los hechos son especialmente llamativos porque además el que fuera alcalde de Cuenca cuando Ávila era primer teniente alcalde, José Manuel Martínez Cenzano, emitió un informe como Defensor del Pueblo de Castilla-La Mancha en el que citaba la ordenanza del consistorio conquense como una de las pocas que existen al respecto en nuestra región.
El Grupo Popular ya denunció la semana pasada el estado lamentable que sufren las áreas infantiles de los parques de la capital, con columpios rotos, quemados, sucios y muy deteriorados. “Este es el colmo de la situación, afirman, porque ahora se instalan juegos infantiles que antes de ser usados suponen un peligro para los niños”.
El portavoz popular ha pedido nuevamente a Ávila que ceje en su empeño y devuelva Carretería a los conquenses, pues “cada decisión que toma al respecto, es peor que la anterior”.