Mediante dicho Convenio el Consistorio procedería a la cesión de uso del edificio, con el objetivo de albergar la colección que integra la Sección de Bellas Artes del Museo de Cuenca, de titularidad estatal y que gestiona la institución regional. Y con la finalidad de que Cuenca cuente con un nuevo y atractivo recurso turístico.
En este sentido, el Consorcio Ciudad de Cuenca adjudicó las obras de “Reforma de la Iglesia de la Santa Cruz”, ya finalizadas, y que se han ejecutado prácticamente “a medida” de las necesidades del Museo de Cuenca.
Por un importe de 321.114,53 euros, las obras han consistido en la ampliación de la superficie para salas de exposición, construyendo dos plantas sobre la zona del patio Norte que ocupaba el depósito de gasóleo, ahora suprimido. Además, la nueva climatización se alimenta del gas natural, que se suministra por la calle Santa Catalina.
En cuanto al aspecto interior del edificio, ha sido totalmente transformado. Respetando la visión unitaria de la nave principal, se han instalado paneles distribuidos por todo el edificio que aumentan la superficie expositiva; y se han renovado totalmente las carpinterías y los aseos, ahora accesibles, y todas las instalaciones, permitiendo acondicionar los ambientes a las necesidades de conservación que requieren las obras de arte.
Situado en la calle Santa Catalina s/n, dentro del Casco Histórico de la ciudad de Cuenca, el edificio forma parte del Patrimonio Histórico Español según lo estipulado en el artículo 40 de la Ley 16/85 de Patrimonio Histórico, y fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) el 15 de enero de 2002.
OTROS ACUERDOS
En materia de Contratación, se ha aprobado el proyecto técnico de las obras de demolición de vivienda unifamiliar entre medianeras C/Almendros-Tiradores Bajos, 33 con un presupuesto de ejecución por contrata de 9.711,98 euros
Cabe señalar que en julio de 2015 por Oficio del Coordinador Provincial de la Consejería de Fomento, se indicó al Consistorio que la vivienda de referencia estaba deshabitada y en ruina técnica y económica. Así, se debía proceder a su demolición y para ello propuso, en aras de una mayor operatividad, que las obras fueran realizadas por la institución local con cargo a la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha.