Doménech ha recalcado la relevancia de este proyecto presentado por Cáritas Diocesana de Cuenca, que se llevará a cabo en el país africano a través de Cáritas Congo y se centrará en la asistencia a refugiados centroafricanos asentados en las localidades de Impfondo, capital del Departamento de Likouala; Bétou, al norte de dicho Departamento; y en Brazzaville, capital del país, con el fin de aliviar sus condiciones de vida, a través de la provisión de bienes y servicios básicos.
Y es que, tal y como ha recordado, en la actualidad, hay cerca de medio millón de personas asentadas en países como República del Congo, Chad, Camerún o República Democrática del Congo, tras haber huido del sangriento conflicto entre dos milicias rivales: los Seleka, de mayoría musulmana, y los combatientes cristianos conocidos como Anti-Balaka.
Situación ésta de la que el secretario general de Cáritas Congo, Alain Mouskouri, daba cuenta al presidente de la Diputación, Benjamín Prieto, a finales del pasado mes de mayo durante una entrevista mantenida en el Palacio Provincial aprovechando su estancia en la capital; sin olvidar, tal y como ha recordado Doménech, que no es un proyecto desconocido para la institución provincial, puesto que hace unos años concedió subvenciones similares a Cáritas para este mismo fin.
Y es que Diputación y Cáritas Diocesana de Cuenca mantienen una estrecha relación, que se han venido materializando en los últimos años en ayudas a distintos proyectos de cooperación al desarrollo, tales como los 18.000 euros concedidos para un centro sociosanitario en Nikki, al norte de Benín, o la mencionada colaboración en dos acciones humanitarias desarrolladas en República del Congo de asistencia a refugiados centroafricanos, sin olvidar el convenio anual por el que la institución provincial otorga 27.000 euros a esta organización para el desarrollo de distintos programas de atención a personas necesitadas, como son los pisos de acogida y la acción social de base.
Compromiso de la Diputación con la solidaridad que también hace extensivo a la cooperación internacional al desarrollo con ayudas por valor de 72.000 euros para cuatro proyectos, cuya convocatoria de 2017, por cierto, está aún por resolver.