Durante su intervención, Fernández Sanz ha incidido en que nuestro país dispone de un buen sistema sanitario público, universal, gratuito y de calidad, así como solidario y equitativo, y ha precisado que en este momento el principal objetivo se centra en dar continuidad a esos mismos niveles de atención y calidad de cara al futuro, lo que implica una redirección de ese sistema sanitario.
El consejero de Sanidad ha puesto en valor las medidas que el Gobierno de Castilla-La Mancha está llevando a cabo en materia de sostenibilidad, encaminadas a alcanzar una mayor eficiencia del sistema sanitario. Así, ha destacado la elaboración de la Estrategia Regional de Cuidados Paliativos, el trabajo que se viene realizando en torno al Plan de Atención a la Cronicidad y la inversión en políticas farmacéuticas y de renovación tecnológica.
“Por nuestra parte, en Castilla-La Mancha trabajamos en un nuevo Plan de Salud, con un horizonte temporal del año 2017 al 2025, que pretende poner énfasis en cómo se va a afrontar el nuevo modelo que necesita la Atención Primaria y los desafíos vinculados al aumento de la cronicidad”, ha destacado el titular de Sanidad en Castilla-La Mancha.
Este Plan de Salud pondrá el acento en la promoción de la salud y prevención de la enfermedad, en el nuevo modelo de paciente situándolo en el eje del sistema sanitario y en la creación de Escuelas de Salud, conforme a los pilares en los que se viene articulando la política sanitaria en Castilla-La Mancha en los últimos dos años. Unos pilares que se basan en la sostenibilidad del sistema sanitario, la humanización de la asistencia, la recuperación de los derechos perdidos y motivación de los profesionales y la potenciación de la Atención Primaria a través de un nuevo modelo organizativo.
“Tras años de recortes y despreocupación, nuestro sistema estaba bajo mínimos y los beneficios que algunos buscaban en la austeridad, los recortes, la falta de inversión, la paralización de obras, los intentos de privatización, lo que en realidad hizo fue poner al límite a nuestro sistema” ha señalado Jesús Fernández.
Para revertir esta situación y garantizar la sostenibilidad del sistema sanitario en Castilla-La Mancha se han reactivado las obras paralizadas durante la anterior legislatura y se ha dotado de un Plan de Renovación de Alta Tecnología con cerca de 28 millones de euros.
Asimismo, se han puesto en marcha diferentes programas para fomentar la humanización de la asistencia sanitaria a través del Plan Dignifica, que en su origen sirvió para mejorar los Servicios de Urgencias de cara a los pacientes, sus familiares y los propios profesionales. Bajo el paraguas del Plan DIGNIFICA, la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha desarrolla paralelamente otras dos actuaciones: Redes de Expertos y Escuelas de Pacientes, involucrando así en un plan de mejora continua de la asistencia sanitaria a los profesionales y los pacientes.
Además, en Castilla-La Mancha se están haciendo esfuerzos muy importantes para la recuperación de las condiciones laborales en consenso con los propios profesionales, así como generar acciones que les devuelva la confianza y les motive a dar lo mejor de sí mismos. A todo esto se suma una fuerte apuesta por la formación, la investigación y la docencia, después de cuatro años en los que se redujeron al máximo las partidas presupuestarias y el compromiso en estos ámbitos.
Este proyecto de cambio y recuperación se asienta en el cuarto y último de sus pilares basado en un nuevo modelo asistencial que implica la potenciación de la Atención Primaria y el fomento de la promoción de la salud y prevención de la enfermedad. Para ello se está dotando de un mayor presupuesto al primer nivel asistencial, actualmente Castilla-La Mancha es un referente a nivel nacional, pues ha alcanzado un 17,02 por ciento del presupuesto, muy por encima del 13,45 por ciento que destinan de media el resto de comunidades, y tiene como objetivo llegar al 25 por ciento al final de la legislatura.
Mayor financiación
A lo largo de su intervención, el consejero de Sanidad en Castilla-La Mancha ha desgranado un decálogo con las medidas que, a su juicio son esenciales para garantizar la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario público, universal, gratuito y de calidad.
Así, Fernández Sanz ha incidido en que en el largo recorrido emprendido por las distintas autonomías para la revitalización de la Sanidad es determinante que se dote de mayor presupuesto en materia sanitaria a las comunidades autónomas y se eliminen las desigualdades territoriales. “Así se lo transmitimos al Gobierno central en la pasada Conferencia de Presidentes de comunidades autónomas”, ha subrayado.