Aulas comunicadas por carreteras y no pasillos es, para que usted lo entienda, la característica diferencial de los colegios rurales agrupados (C.R.A.) respecto a cualquier instituto o colegio compacto. De ese modo los horarios de clase dependen de muchos kilómetros de viaje oficial para el desarrollo cotidiano de la actividad entre los pueblos. Cada C.R.A. escolariza a ciento y pico alumnos de 7 u 8 localidades. En los C.R.A. también se dan matemáticas a primera hora e inglés a segunda, incluso suena el timbre para cambiar instantáneamente de clase o salir al recreo. Para ello, los horarios docentes se ensamblan combinando periodos de clase con periodos de desplazamientos que parten desde el domicilio oficial del centro (vulgarmente llamado sede administrativa o cabecera) consignado en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha todos los años con su composición jurídica.
El acuerdo de itinerancias ha sido un referente regulador para otras actividades educativas que fueron surgiendo durante la década de expansión de servicios educativos: orientación, formación, coordinación pedagógica, etc. Pero usted todo eso se lo perdió porque estaba en otros menesteres que nada tienen que ver con lo educativo; por eso ahora no entiende ni lo que le dicen los sindicatos en la Mesa Sectorial de Educación ni los miembros del Consejo Escolar de Castilla-La Mancha. Ni falta que le hace, porque en Castilla-La Mancha usted es el primer consejero del ramo que no tiene perfil educativo. Además la Presidenta le ha escogido ignorante en la materia a sabiendas para no perder el norte recortador. Al menos, estas líneas servirán para que usted no se acueste hoy sin conocer algo más sobre lo que se está cepillando.
Germán Cuadros Segarra
Delegado de la Junta de Personal Docente de Cuenca