García-Page, que realizaba estas declaraciones momentos antes de iniciarse el cónclave socialista, afirmó que el PSOE "está muy por encima de las personas, y lo importante es que los ciudadanos deben ver que hemos dejado a un lado nuestros problemas internos y percibir que nos preocupamos de resolver sus problemas.
Señaló que "llevamos muchos meses de tortura interna, todos lo hemos vivido con mucho dolor, unos y otros, y ahora lo que queda, es con toda tranquilidad y dignidad, apoyar lo que ha decidido la militancia".
El líder de los socialistas castellano-manchegos mostró también su colaboración y deseó suerte tanto al nuevo secretario general como los órganos de dirección que se elijan.
Igualmente, quiso dejar claro que se debe al voto de los ciudadanos de Castilla-La Mancha. "Esa es una responsabilidad de la que nunca haré dejación, pero también quiero conciliar las dos lealtades la que les debo a mis ciudadanos y a mi partido". Por eso, aseguró que lo que pase en este Congreso Federal vinculará lo que pase en los congresos regionales y provinciales y en los procesos personales de reflexión, entre ellos el suyo