Los datos revelan que casi 2 de cada 3 españoles ya ha sustituido su cámara de fotos tradicional por la del smartphone. Y no es una tendencia exclusiva de los más jóvenes, incluso los mayores de 40 años ya han dejado de utilizar su cámara de fotos en pos del smartphone en casi un 60% de los casos. Sin embargo, son los veinteañeros y los treintañeros los que más acusan esta tendencia, concretamente un 67% y un 64% respectivamente.
De hecho, cada vez más españoles utilizan la de su teléfono móvil como única cámara de fotos para las vacaciones. En concreto 1 de cada 3 usuarios, aunque son los veinteañeros los que lideran el ranking con un 34% y especialmente los hombres, con un 30%.
Conectividad, acceso directo a redes sociales, alta calidad de las fotografías de los cada vez más punteros smartphones y la comodidad de llevar toda la tecnología en el bolsillo, han sido sin duda la clave para que los smartphones se estén haciendo con el pastel de la fotografía amateur y para que los españoles –especialmente los jóvenes- “jubilen” a las cámaras tradicionales.
La realidad del mercado es que, según la consultora GFK, las ventas de cámaras fotográficas en España cayeron un 27% con respecto a 2011 frente al crecimiento de las ventas de teléfonos inteligentes, especialmente en España, que lidera el mercado de smartphones en Europa con cerca de 20 millones de este tipo de dispositivos.
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